Kintsugi: La belleza de las imperfecciones

Una pieza de cerámica rota puede constituir una tragedia o una oportunidad. En esta nota te contamos sobre el Kintsugi, una perspectiva japonesa de reparación que puede aplicarse a múltiples aspectos de nuestras vidas.

Se trata de una técnica japonesa relacionada tanto con el arte como con la filosofía, la cual plantea reparar grietas con oro, para resaltar las imperfecciones. De hecho, esta acción sería una traducción fiel a la palabra, la cual significa “reparación en oro”. Decimos que es una filosofía porque representa una forma de destacar las cicatrices, lo cual puede aplicarse tanto a una pieza de cerámica como al mismo cuerpo humano. Incluso podemos pensarlo desde una perspectiva interna, a partir de lo que vivimos.

En cerámica, como en otras disciplinas, es lógico pensar en crear piezas lo más perfectas posibles, sin embargo, lo que nos enseña el Kintsugi es a darle una segunda vida a las cosas rotas, las cuales no tienen porqué perder su encanto.

El camino a la perfección es en sí mismo imperfecto, por lo tanto es mejor adoptar una actitud optimista con respecto a nuestros “errores” y verlos como parte del proceso. Todo es aprendizaje y todo puede quedarse con nosotros.

Reparar en vez de desechar. Una técnica que denota resiliencia y puede enseñarnos a ver belleza en las imperfecciones, otorgándole protagonismo a las fallas.